3. Luis

Publicado el 12 de enero, 2011

Luis estaba sentado en la zona de mesas, justo en la entrada de Galerías Escalón. Estaba tomando una Coca-Cola en lata y fumando un cigarro. Tras sus lentes oscuros había un par de ojos perdidos  en la calle, sólo miraba los carros pasar de un lado a otro, tenía tanto en mente. No sabía cómo iba a salir todo lo que había planeado por hace tanto tiempo, y todo podría definirse en esta pequeña reunión que iba a tener en cuestión de diez o quince minutos.

Un vistazo al reloj, luego un trago de soda. Acercaba el cigarro a su boca, dos segundos después humeaba. Con su dedo pulgar y medio acercaba el cigarro al cenicero negro en la mesa y luego, con el índice, lo golpeaba suavemente para que cayeran las cenizas.

(Debo de dejar de fumar)

Pero él sabía que quizá nunca lo haría, nadie lo hace en verdad a menos que se enfrenten a una enfermedad mortal o algo con magnitud similar. Hacía ya varios años que llevaba fumando, él lo tomaba como una forma de relajarse. Al menos al principio. Luego se convirtió en lo que es para muchos: sólo un vicio. Una necesidad del cuerpo, así como comer, beber agua o ir al baño.

Pocos carros transitaban el Paseo General Escalón, era domingo y de mañana. Un domingo en octubre con todo y vientos. Los taxistas que esperaban algún cliente en la entrada usaban chaquetas. Había sido un año extraño, por primera vez en hace mucho tiempo, los vientos de octubre en realidad comenzaron en octubre… no a mediados de noviembre. Se alejó de sus pensamientos al ver entrar a la persona que estaba esperando. Se veía justo como en la fotografía que le envió por correo electrónico.

(Este es el último)

Sonrió y apagó lo que quedaba de su cigarro. La persona a quien esperaba, la chica a quien esperaba se detuvo en la entrada del centro comercial y comenzó a ver entre las mesas, buscándolo. Tomó unos segundos, una mirada un poco dudosa y luego una sonrisa para confirmar que se habían reconocido.

“¿Laura?” – preguntó Luis mientras se acercaba.

“¡Mucho gusto!” – respondió Laura mientras acercaba su mano derecha para saludarlo.

Tags: Escritos, Ficción, Novela Corta

© Roberto Martínez, 2011